martes, 27 de marzo de 2012

"Los Artistas" de JAVIER CÁNAVES: una nívola contemporánea


"Parecerá acaso extraño a alguno de nuestros lectores que sea yo, un perfecto desconocido en la república de las letras españolas, quien prologue un libro de don Miguel que es ya ventajosamente conocido en ella, cuando la costumbre es que sean los escritores más conocidos los que hagan en los prólogos la presentación de aquellos otros que lo sean menos. Pero es que nos hemos puesto de acuerdo don Miguel y yo para alterar esta perniciosa costumbre, invirtiendo los términos, y que sea el desconocido el que al conocido presente.
Porque en rigor los libros más se compran por el cuerpo del texto que no por el prólogo, y es natural por lo tanto que cuando un joven principiante como yo desee darse a conocer, en vez de pedir a un veterano de las letras que le escriba un prólogo de presentación, debe rogarle que le permita ponérselo a una de sus obras. Y esto es a la vez resolver uno de los problemas de ese eterno pleito de los jóvenes y los viejos."
VÍCTOR GOTI, "Prólogo" , NIebla.

        La distancia entre Goti y yo es  evidente: de momento, yo no soy un personaje, quizás una marioneta en algunos momentos, pero eso es otro tema...; no diré mi edad por coqueteo, pero ya no soy joven; tampoco he prologado el libro de Javier, pero sí pienso dar mi opinión sobre él. 
        La cita de la nívola unamoniana es un regalo para el autor. No es casual: Julio Cantallops me recuerda a Augusto Pérez, inmerso en esa lucha por la supervivencia constante en un mundo lleno de insatisfacciones, mediocre. El primero busca el amor verdadero, fuera de ideales; el segundo intenta que su autor no lo sacrifique. La mezcla de voces narrativas de ambas lo ratifica. Javier nos confunde durante todo el relato con diversas voces y testimonios, quizás con la intención de distanciarse como autor; pero sorprendentemente causa la emoción inversa: empatizamos con el protagonista y tal vez con Cánaves. Ese escritor insatisfecho, cuya vida resulta pornográfica y grotesca, se convierte en un modelo en el título Los Artistas, pero primero lo será para una mujer vulgar, a quien acude por desesperación...
        Quizás haya más similitudes entre ambas novelas, los autores también comparten inquietudes. Ambos forman parte de una época en que la palabra "crisis" está boca de todo el mundo. Posiblemente, la lucha existencial sea diferente; pero los tiempos han cambiado: ahora lo importante no es la existencia de Dios, sino la conciencia de que somos más vulnerables que nunca ante el amor y que la felicidad resulta más angustiosa que el desengaño, porque es necesaria más implicación emocional...

viernes, 23 de marzo de 2012

Los artistas, de Javier Cánaves

Los artistas (Baile del sol)

El cada vez menos poeta Javier Cánaves, parte de sí mismo para conducir esta novela que, como las grandes, no trata de nada pero habla de todo.
Julio Cantallops, escritor estancado en un cómodo olvido del gran público tras un fulgurante inicio literario, con varios premios importantes de poesía, tiene un trabajo que le permite vivir bien, colabora en el diario más importante de la ciudad con un artículo semanal y no le faltan mujeres. Parece que tiene todo lo que un hombre puede desear y ahí comienza el juego: no es feliz. Tiene un gran vacío, fantasmas de un amor perdido que jamás encontrará en las barras de bar ni en ningún otro lugar, la sensación de estancamiento creativo, de tener menos fama de lo que realmente merece.
El acierto de esta novela es la empatía que se crea con el protagonista, en la cual no es necesario ser artista, sino mamífero, que diría Jesús Lizano: No llega a ser pesadilla, pero todo tiene la textura de esos sueños incómodos en los que no sucede nada extraordinario pero de los que uno desea despertar cuanto antes, y ese párrafo del libro define la historia. Inquietante, pues te obliga a hacerte preguntas de las cuales no quieres saber las respuestas. ¿Eres feliz? ¿Estás aprovechando tu vida? Da igual que las dos respuestas sean afirmativas, temes que te estés mintiendo.
Aparte está el juego en la novela con segundas y terceras voces que se intercalan o incrustan en la trama: artículos escritos por el protagonista, retales del diario, comentarios de gente que le conoce, etc, muy bien llevados por el mallorquín, sin desbaratar ni menguar el interés en ningún momento.
Y esto ya es personal, leer a Javier (su blog AQUÍ) da ganas de escribir, de sentarse a crear un poema y creértelo tuyo, robar un matiz, una sensación. Quizás por eso Cánaves no escriba poemas hace meses, puede que los artistas de mierda se los estemos robando.
Si con eso sigue escribiendo novelas como Los artistas, no está tan mal. 

http://elhombreinvisible-invisible.blogspot.com.es/2012/02/los-artistas-de-javier-canaves.html 

jueves, 22 de marzo de 2012

Primer concurso de microrrelatos "En palabras"


El pasado 1 de marzo mi blog En 99 palabras cumplió su segundo año. Para celebrarlo he decidido convocar, con la colaboración de la Editorial Baile del Sol y de la ilustradora Clara Varela "Claruilna", la primera edición del concurso de microrrelatos “En 99 palabras” 
BASES DEL CONCURSO

1. Podrá participar cualquier persona, con la condición de ser tanto autor como jurado.

2. Se podrá presentar un único microrrelato, escrito en castellano e inédito.

3. El microrrelato será de tema libre y estará escrito exactamente en 99 palabras (sin contar el título, que será obligatorio).

4. El participar como autor implica hacerlo también como jurado, por lo que solo podrán votar quienes hayan presentado un microrrelato al concurso. Los autores participantes que no emitan su voto serán eliminados.

5. El microrrelato se enviará a en99palabras@gmail.com, poniendo en el asunto, “Concurso En 99 palabras”. En el cuerpo del mensaje (no en archivo adjunto) irá: nombre, correo electrónico, blog (no es obligatorio tenerlo), título y texto del microrrelato.

6. El plazo de admisión de los microrrelatos comienza el 5 de marzo y finaliza el 4 de abril de 2012, ambos inclusive.

7. Todos los microrrelatos recibidos se publicarán el 9 de abril de 2012 en el blog del concurso http://concursoen99palabras.blogspot.comnumerados según su orden de llegada.

8. En los microrrelatos publicados no aparecerá el nombre del autor, solo título y texto, para así garantizar el anonimato durante todo el concurso.

9. Los autores dispondrán hasta el 20 de abril de 2012 para leer los microrrelatos y decidir sus votos, que se enviarán a en99palabras@gmail.com

10. Cada participante votará a sus cinco microrrelatos favoritos, no pudiéndose votar a sí mismo, de la siguiente forma:
- Título del 1º: 5 puntos
- Título del 2º: 4 puntos
- Título del 3º: 3 puntos
- Título del 4º: 2 puntos
- Título del 5º: 1 punto

11. Los resultados se publicarán a partir del 26 de abril de 2012 en  http://concursoen99palabras.blogspot.com, así como en mis otros dos blogs: http://en99palabras.blogspot.com  y http://madridfotoafoto.blogspot.com
12. Gracias a la Editorial canaria Baile del Sol, que ha accedido a mi petición de colaboración desinteresada, los  ganadores recibirán los siguientes premios*:
Microrrelato ganador5 libros de relatos, gentileza de Baile del Sol.
Segundo puesto3 libros de relatos, gentileza de Baile del Sol.
Tercer puesto2 libros de relatos, gentileza de Baile del Sol.
Además, los tres ganadores, así como los que hayan quedado en cuarto y quinto lugar, recibirán un ejemplar del libro de microrrelatos “En 99 palabras” autoeditado por mí el año pasado.

* Nuevos premios cedidos desde que ha comenzado el concurso:
- 1 ejemplar de Discordancias de Elena Casero.
- 3 ejemplares de Zoom de Manuespada.
- 1 ejemplar de "Sueños enlatados" de Natalia Viana "Tali".
- 2 ejemplares de "Los jardines secretos" de varios autores (cedido por Xavier Blanco).
- 5 ilustraciones de Sara Lew del blog "Microrrelatos Ilustrados".
- 5 ejemplares de "La saliva del tigre" de Pablo Gonz.


13. Si algún autor, con libro publicado, desea donar alguno de sus libros para que forme parte de los premios, estaré encantado de recibirlo. Por ello me reservo el derecho de ampliar los premios citadosen el punto anterior, ya sea de esta forma o de cualquier otra.


14. La participación en el Concurso implica la aceptación de las bases.



Organizador del concurso: Miguel Molina

Creadora del logo del concurso: Clara Varela "Clarulina"

Editorial colaboradora: Baile del Sol


miércoles, 21 de marzo de 2012

Los artistas, crónica de una muerte por inanición


Javier Cánaves nos acerca en Los artistas a todas las orillas del desconsuelo. Detallándonos la búsqueda vital ralentizada de un joven con vocación de escritor y vocación de vacío. Entre el ego y el desprecio por sí mismo, Julio Cantallops no sabe hacia dónde dirigirse, de qué modo aliviar su desasosiego. Se quiere convertir en personaje de las mismas novelas que renuncia a escribir, interpretando un papel que a ratos le queda pequeño y a ratos grande. Nos ayuda a descubrir su juego el recuerdo vago que ha dejado en una mujer, una mujer que le atraía y le repugnaba a partes iguales, tal vez porque en ella no dejaba de reflejarse su propia historia de soledades y miedos.
Con una prosa que va de lo prosaico a lo poético, en un vaivén que tiene mucha relación con las inseguridades de su protagonista, Javier Cánaves consigue contagiar esa inquietud que provoca la deriva: “Las palabras debería servir para escapar de este precipicio, de esta parálisis que empuja a la caída”, escribe Julio Cantallops. 
Los artistas “se pasan la vida buscando el puente más hermoso desde el que saltar, ese salto que podría justificar todas las lágrimas de niños perdidos que llevan dentro”, asegura la mujer a la que nunca amó Julio Cantallops. Y así es en la novela, el escritor no encuentra salvación ni en el amor ni en la literatura, muere de inanición tras dar cuenta de toda la crónica de su apatía.
Una novela que no da tregua y que, después de La historia que no pude o no supe escribir, publicada también en Baile del Sol, confirma a Javier Cánaves como un extraordinario narrador y un testigo del desconcierto actual de nuestra sociedad.

martes, 20 de marzo de 2012

Piedras en el camino


Por Leoncio González
Casi todo es mío
Antonio Jiménez Paz
Ediciones Baile del Sol
Santa Cruz de Tenerife, 2008
83 páginas.
El sendero en el que Pessoa se ve atravesado, en la primera página de este libro, es en el que la duda atormenta al caminante. Estas páginas son el lento deambular, de Antonio Jiménez, por ese recorrido del desasosiego que nos da la incertidumbre.
En este libro la tinta mancha las yemas de los dedos al pasar las páginas. Esas manchas no hacen sino evidenciar que las realidades no lo son tanto, “no se borra lo que uno quisiera”, dice. Antonio Jiménez ha escrito un manifiesto dubitativo en Casi todo es mío (Ediciones Baile del Sol, 2008). Sabe que ese “casi” no engloba apenas su nombre y que ese “todo” se diluye como una gota de absenta al contacto con un terrón de azúcar. Así son la mayoría de estos poemas, una gran oleada de sabor, penetrante y oloroso, que luego, al inminente chasqueo de la lengua, se convierte en un poso de preguntas, de verbos en subjuntivo, de adverbios, de adjetivos nada definitivos cargados de preguntas y de versos que no hacen más que certificar esa duda: “Me describo y no me consigo creíble”.
Del contacto con el otro, es de donde nace la única certidumbre de estos poemas: del roce caliente de la piel con otras pieles: con la piel del papel, con la piel de la piedra, con la piel de otros cuerpos (quizás los mismos, pero distintos): “Venimos frotándonos desde antes de los amaneceres”. Y ahí es donde talamos árboles que otrora sólo mirábamos, y donde se describen cosas que antes sólo se pensaban, todo bajo la sombra de un hombre que ya ha desaparecido, en favor del poeta –de uno o de muchos.
Por último, en la digestión poética de estas páginas aparece cierto hedonismo doloroso que ratifica circunstancias, actitudes, respuestas, mas poco creíbles todas ellas, y al mismo tiempo resuena de golpe una suerte de solución, cuasi definitiva: “entonces me borro”.
Jiménez (junto a sus cuerpos otros: el poeta, el lector, el crítico) caminan con un lastre a cuestas, hacia un lugar donde no tendrá que explicar ni quién, ni cómo se llama,  el que ha pergeñado todas estas dudas: “Quién soy / no lo sé. / O innumerable”.
Desde la barrera de la lectura, quizás, lo más fácil sería sacar las herramientas de disección y comenzar a cortar cada verso, cada duda, y sacar de ella una explicación más o menos lógica, cartesiana, rebuscada entre otros versos conocidos de este autor, de sus libros, de sus lecturas, de sus no lecturas, de sus amigos, de sus querencias y de sus odios. Quedaríamos colocados así en un terreno poco dudoso, en donde, ridículamente sólo podríamos evidenciar ese verso que resuena como el gong en el dojo zen: “Voy delante de mi aunque detrás”.
“Pero nadie sabe por cuál página ando…”, advierte, y faltaría menos. Casi todo en este libro nos conduce a una calle sin salida, en la que el poeta ¿se queda? y sus versos lo trascienden, lo abandonan, lo dejan al azar de nacer de nuevo, de volver a escribir todas esas palabras, preguntas, verbos, adverbios, dudas: “Lo demás/piedras en el camino son”.

lunes, 19 de marzo de 2012

HISTORIAS DE ESTE MUNDO DE MATÍAS ESCALERA CORDERO: VISIÓN TELEVISIVA Y CINEMATOGRÁFICA




Alberto Gil-Alber/ En sentido figurado



Título: Historias de este mundo
Autor: Matías Escalera Cordero
Editorial: Baile del Sol, 2011 (212 páginas)

Matías Escalera Cordero es escritor en el sentido literal del término; escribe y experimenta en la literatura; busca con su escritura obtener un fin, el objeto de un plan pensado, y lo está consiguiendo. Ese plan le ha llevado de la poesía a la novela y del teatro al ensayo  literario en forma de artículos especializados. Toca todos los palos porque esa es la única forma de hacerse escritor, insisto, en el sentido literal del oficio.
Historias de este mundo es una colección de relatos que se alimenta de esa especie de visión televisiva y
cinematográfica que el autor ya experimentó con tanto acierto en su novela Un mar invisible (IslaVaria, 2009), pero en sus relatos va más allá, en cuanto al punto de vista, pues nosotros vemos/leemos lo  relatado en la pantalla, pero también lo que la cámara no logra mostrarnos. El lector tiene la sensación de observar por varias ventanas con distinto plano, pero los mismos acontecimientos, y en todas ellas aparece una realidad igualmente injusta; ésta que vivimos ahora. Así sus intervinientes, que no protagonistas, los seres que son objeto del relato, se bestializan y se vuelven personajes de una ópera bufa, como de un cabaret con la música atonal de Schönberg de fondo. El relator es aquel abogado que en la investigación de los delitos colecciona los hechos en los que se va a basar su acusación, eso lo decía Roscoe Pound, un juez americano autor de novela negra. En el caso de Historias de este mundo adquiere todo su sentido, puesto que su autor nos presenta una relación de acontecimientos que acusan, que formulan y describen los males de nuestro mundo desde una actitud inquisitorial. Es imposible hablar de estos relatos sin pensar en Chejov, en Tolstoi o en Carver; cada uno de ellos refleja un retazo de modernidad al retratar una realidad decadente. La decadencia de las clases sociales en la Rusia Zarista, en Chejov, la decadencia de la  explotación de los siervos, en Tolstoi, y la decadencia de la tradición americana del  SelfMade y la  Felicity de los sesenta, en  Carver. Pues bien, en esas estamos; el relato de  Matías Escalera lacera con inquina nuestra conciencia con la descripción de una decadencia mucho más próxima, la nuestra. Utiliza todos los recursos y mecanismos que tiene a su alcance, la sátira, el preciosismo, el realismo, la irrealidad y la subrealidad, el hiperrealismo, la imitación literaria (es brillante su pastoril emulación petrarquista), etc.  El relato intercalado con el comentario periodístico, en francés o en inglés, en El final del limbo; o esa reseña del mal absoluto con textos de  La
Vanguardia sobre Kandido Aspiazu, es magnífica.
Los relatos de Matías Escalera Cordero se construyen unos sobre otros de forma arquitectónica; son ladrillos de distinto material, desde la paja al titanio, de un muro que el propio autor nos invita a derribar, explicándonos que en realidad es el muro de la vergüenza. El muro que entre nosotros se está trazando de forma tan vergonzosa por las entidades financieras, las agencia de calificación y el gobierno de los estados. Las primeras, dedicadas a la rapiña; el último, a la obtención de poder. Siempre más riqueza y más poder,  
pobrecitos nosotros, que vivimos a ambos lados del muro. Estamos condenados a mirarlo al abrir las ventanas, a que nuestros hijos lo pinten con los  graffiti de la injusticia, y a perder la vida y la esperanza en el empeño de pasar al otro lado, sin saber que el otro lado es idéntico al que hemos abandonado. A través del relato Matías Escalera, al igual que en su momento lo hicieron Chejov, Tolstoi y Carver, nos formula la pregunta universal: ¿estáis dispuestos a derribar el muro? En la modernidad de Tolstoi y Chejov, esa pregunta
tuvo una respuesta afirmativa y la consecuencia fue la Revolución Bolchevique, el pandemonio de La Gran Guerra, primero,  y  de  la  II  Guerra  Mundial,  después.  De  la modernidad de Carver, en cambio, sólo vino la revolución tecnológica; posiblemente la diferencia radique en que en el primer caso la respuesta la daban ciudadanos desesperados y, en el último, simplemente ciudadanos infelices. Queda por saber quién tiene que dar la respuesta ahora. Por el bien de mis hijos, espero que la respuesta, esta vez, sea una
revolución ética, de ideas claras y manos blancas, y no de aquellas tan productivas que se llevan por delante
generaciones enteras y el futuro de los hombres, para, a la vuelta de cien años, encontrarnos en la misma situación. Sé que estoy siendo pesimista, comentando un libro de relatos que no lo es.
Admítaseme el recurso para invitarles a leer estas Historias de este mundo. Un buen libro de relatos; un  raro libro de relatos; un extraño libro de relatos, pero qué buena literatura no lo es.

http://ensentidofigurado.com/ESF45-24d.pdf

viernes, 16 de marzo de 2012

STONER


Una novela estupenda. Magistral y emocionante. Qué difícil es escribir sobre una obra tan cautivadora. Da la sensación de que cualquier cosa que se diga va a deshacer todo el encanto de la lectura. No recuerdo ahora por qué busqué esta novela para leerla; no sé si fue por alguna alusión a ella que leí o por un comentario de alguien en la radio que escuché. Luego he leído una reseña en ABC de Rodrigo Fresán, que fue el gran valedor y vocero de esta espléndida novela publicada en Ediciones Baile del Sol, la editorial tinerfeña que también nos dio uno de los libros de José María Cumbreño. Y también he leído lo que escribió Enrique Vila-Matas en El País, e incluso la opinión entregada de algún lector como Juan Antonio González Fuentes. Las dos primeras palabras de la novela de John Williams (1922-1994) son "William Stoner", y tras ellas se nos da la información de que entró como estudiante en 1910 en la Universidad de Missouri, con diecinueve años, en donde se doctoró y aceptó una plaza de profesor, y en donde enseñó hasta su muerte en 1956. Así de sencillo. Así de tan universitariamente incorrecto, pues no se ve bien que trabajes en la misma universidad en la que estudiaste. Así de familiar, por tanto, esa inseguridad del profesor que "cuando daba clases, se encontraba a veces tan abstraído en su asignatura, que se olvidaba de sus limitaciones, de sí mismo, e incluso de los alumnos que tenía enfrente. De vez en cuando se sentía tan arrebatado de entusiasmo que tartamudeaba, gesticulaba e ignoraba los apuntes de clase que normalmente guiaban sus discursos. Al principio le molestaban estos arranques, como si se tomara demasiadas confianzas con su asignatura, y se disculpaba con sus alumnos, pero cuando éstos empezaron a revelar indicios de imaginación y el asomo de un amor vacilante, se animaba a hacer aquello a lo que nunca le habían enseñado. El amor a la literatura, al lenguaje, al misterio de la mente y el corazón manifestándose en la nimia, extraña e inesperada combinación de letras y palabras, en la tinta más negra y fría... el amor que había ocultado, como fuese ilícito y peligroso, empezó a exhibirse, vacilante en un principio, luego con temeridad y finalmente con orgullo." (págs. 102-103). Un trabajo gustoso. Su relato me reconforta por lo que tiene decompartido; me pone en alerta por el paralelismo con las circunstancias de fechas como el crack de 1929, cuando, más o menos, pueden situarse en el discurso las líneas transcritas; y también me conduelo con escenas en las que colegas y amigos se comportan como adversarios distantes y desconfiados. La novela de Williams sabe hablar del desamor doméstico, del amor paterno y de otras entregas —por qué no, provocadas por la carencia primera de todas— que en la vida del protagonista se focalizan en la alumna "joven de cabello oscuro" o en "la vieja pasión por el estudio y el aprendizaje" que vive Stoner "con el vigor curioso e incorpóreo del universitario cuya condición no es ni joven ni anciana". Cómo no conmoverse. Y hay más.
John Williams, Stoner. Traducción de Antonio Díez Fernández.
 Tenerife, Ediciones Baile del Sol, 2010

miércoles, 14 de marzo de 2012

Viaje a Londres, el testimonio adolescente de Vitalie Rimbaud


m133Tenía 16 años y sólo le faltaba uno para morir. Era Vitalie Rimbaud, la hermana del poeta, cuatro años menor y que lleva el mismo nombre que su madre. Cuando Jean Arthur ya ha escrito Temporada en el infiernorecibe la visita de su madre y de su hermana en Londres, ciudad en la que está tratando de labrarse un futuro profesional que le lleva a convertirse por unos meses en maestro-ayudante en un colegio británico. En este contexto, la joven Vitalie escribe un diario que ha publicado recientemente la editorial Baile del Sol, según una edición y traducción del poeta David González y Dagmar Buchholz: Viaje a Londres (Julio 1874).
Se trata del magnífico testimonio de la melancólica adolescente, llegada de París, que observa con ojos curiosos y críticos la sociedad decimonónica londinense y los avatares de la vida de su hermano.  Vitalie no termina de comprender las maneras británicas y añora la expresividad y sensibilidad de los parisinos pero acepta su estancia estoicamente comprendiendo que su hermano necesita apoyo familiar en esos momentos.
La prosa de la pequeña Rimbaud es sencilla, aunque contiene un poso de tristeza y de añoranza capaz de contagiar a quien lo lee, sobre todo porque no es fácil olvidar que la autora moriría poco después de escribir este diario, víctima de una sinovitis.
Esta edición se ve complementada por la obra gráfica de un gran número de artistas,  ilustradores  e ilustradoras que aportan su particular visión de la historia relatada por Vitalie.
Se trata en definitiva de una curiosa propuesta literaria que recupera este manuscrito, respetando su carácter testimonial e ingenuo, y acercando a los lectores otra perspectiva sobre el gran poeta francés.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Entrevista a Joaquín Lloréns en Informacion.es


Joaquín Lloréns. Escritor

´El caso Urdangarin tiene trama para convertirse en una buena novela negra´

 10:22  


Joaquín Lloréns regresa a Elche con su nueva novela.  DIEGO FOTÓGRAFOS

Vuelve a Elche como parte del recorrido existencial de sus obras, en donde se siguen mezclando ingredientes de novela negra con cuidadas reflexiones en torno a la democracia y los ciudadanos. En esta ocasión la narración tiene nombre propio: "Política criminal".

ANTONIO JUAN SÁNCHEZ Reconoce abiertamente que le gusta fabular y deja buena muestra de ello con la tercera entrega de una serie que tiene como protagonista a una singular y joven investigadora. Hace dos años Joaquín Lloréns (Bilbao, 1962) llegaba desde Mallorca para presentar su "Amor envenenado" y hoy realizará, de nuevo entre palmeras, una defensa apasionada de su "Política criminal", junto a fieles seguidores de su narrativa y con la librería Ali i Truc como escenario.

¿Qué se esconde detrás de esta nueva entrega con la firma de Joaquín Lloréns?
En esta tercera entrega, tras "Citas criminales" y "Amor envenenado", se esconde una autodenominada "Hermandad para la regeneración democrática" que, amenazando de muerte a doce personas de amplios recursos financieros y a sus seres más queridos, obliga a alguno de ellos a ir asesinando políticos cada vez más relevantes para que los partidos políticos se avengan a someter a referéndum ciertos cambios constitucionales que mucha gente reclama para alcanzar una democracia más real y próxima a los votantes: listas abiertas, segunda vuelta, igualdad del valor de los votos en todas las comunidades autónomas, someter a referéndum las decisiones que tienen trascendencia para los ciudadanos, etc.

Ficción y realidad, una fina línea con la que usted suele jugar en sus textos, sin olvidarse de reflexiones sinceras...
Creo que mi novela, en su aspecto político, refleja un sentimiento generalizado e intenta contribuir a que se cambien algunas cosas. Los ciudadanos nos sentimos defraudados por nuestros políticos, sean de la ideología que sean, máxime cuando todos ellos han renunciado de hecho a su ideario. Tenemos la sensación de que sólo se preocupan de nosotros cuando llegan las elecciones. El ínterin de los cuatro años parecen actuar sin tener en cuenta los deseos del pueblo. "Política criminal" pretende, como ha ocurrido después con el movimiento 15 M -la novela está escrita hace tres años y medio-, poner sobre el tapete que los ciudadanos exigimos que nuestros políticos dejen de gobernar pensando en las próximas elecciones y pasen a tomar decisiones pensando en el bien común a medio y largo plazo. A mí me gustaría que quien lea la novela me recuerde como alguien que hizo lo que estuvo en su mano para lograr esos cambios.

Y luego la verdad más absoluta nos trae historias que parecen sacadas de sus obras. Usted reside en Mallorca y no habrá sido ajeno al caso Noós y Undargarin. ¿Hay trama suficiente para convertirse en una novela negra, como las suyas?
Indudablemente. El caso Undargarin tiene trama más que suficiente para convertirse en una buena novela negra. Y estoy seguro de que alguien lo hará. Pero tiene más interés para un biógrafo que un novelista. Para mi gusto tiene demasiado de morbo y poco de fabulación. Es un caso entre cien mil. En Madrid y la Corte siempre han existido "conseguidores", gente que cobra dinero por presentarte a alguien, por organizarte una reunión con alguienÉ Urdangarin no es más que uno de esos casos. Es demasiado "real". A mí me gusta más fabular.

Podemos hablar también de su futuro literario...
Además de publicar las dos últimas novelas de la serie de "Beatriz, la investigadora licenciosa", es decir "Venganza criminal" y "Crimen de lesa majestad", tengo en la nevera una novela de aire lovecraftiano y otra más sicológica que reflexiona sobre la infidelidad, el perdón, la venganza y la muerte.

martes, 6 de marzo de 2012

LOS LADOS DEL CÍRCULO de Amilcar Bettega en La Biblioteca Imaginaria


Almilcar Bettega nos acerca con Los lados del círculo a una narración que nos deja en estado de shock. Este autor brasileño nos ofrece un complicado sistema de posibilidades y lecturas; sus relatos son inteligentes y están interconectados. Su prosa nos lleva hacia lo onírico.

Los once relatos que aparecen en este libro están divididos en dos partes: Un lado y Lado uno. Las historias se quedan abiertas a la interpretación del lector. El autor nos enseña cómo a través de las letras se puede presentar una grandeza psicológica; escritor, traductor y autor de tres libros de cuentos. Los lados del círculo recibió el premio Portugal Telecom de Literatura, uno de los más prestigiosos de la literatura en lengua portuguesa.

Un lado, compuesto de cinco relatos, llega para advertirnos que la noche infinita va desvelando sobre la ciudad su dibujo inequívoco. Aquí tratamos de poner lógica a lo que sólo es intuición.

Una especie de necesidad vital y colectiva, una forma de dialogar con el otro, así comienza el primer relato de este maravilloso libro. Un grupo de personas comienzan a formar un circuito eléctrico que se activa por toda la ciudad. Las manos en los bolsillos del chaquetón, un cigarrillo fluctuando en la oscuridad, la figura cabizbaja y después las sonrisas, la esperanza arrastrando las bolsas por el suelo. Nos habla de las ciudades metálicas y nos recuerda a Maldoror. Las ilusiones de los protagonistas aparecen tras los ojos quemados por el sol, se sientan en un mirador para ver las antenas de televisión y se dan cuenta de que las imágenes nunca son completamente reales.

Aparece el Ministerio de Justicia, una lucha judicial contra el gobierno argentino por los daños sufridos por la familia del protagonista durante los años de la dictadura. Artículos, geometrías y noches cubiertas de velo negro.

Llega el día del cumpleaños y está solo. Siente cansancio, un cansancio que le calma y le adormece. Decide hablar de las hormigas, de la noche anterior, de la bebida, de cuando se dio cuenta de que el sol estaba sumergido en el agua. Medir el tamaño de la soledad es difícil pero el protagonista encuentra la forma a través del tamaño de su casa, de la ausencia de los seres queridos.

Caminar sin rumbo por las calles, sentir el sufrimiento amoroso y dejar de comer. Tras dormir cincuenta horas seguidas se da cuenta que la ama a ella, el día tres y cuatro de febrero. Pero en los domingos de verano llegan otros amigos y un grupo de perros revuelve la basura. El coche levanta una nube de polvo y recuerda a Wagner, piensa en un baño en la piscina. Tiempo después no desea hablar con nadie. La soledad de nuevo viene a implantarse en los protagonistas, busca hacerse un hueco en sus almas. Relatos de gran fuerza poética y excelente técnica.

La segunda parte, Lado uno, también está compuesta de cinco relatos. Uno de los protagonistas camina bajo un viento gélido que le hace sentir que está triste, desvalido en las calles de su ciudad. 3º, el viento es riguroso. Los periódicos hablan de los crimines, del futbol, pero no se su situación desfavorecida. Y así, volvemos a Cortazar, su figura delgada y desgarbada, y nos preguntamos: ¿cuál es la verdadera literatura? Tal vez un delirio fantasioso con una gran claridad.

Yo soy el autor. Listo, está escrito, está hecho. Así nos cuenta en uno de sus últimos relatos.

Este escritor, que en breve será más conocido en España, llega para ofrecernos unos textos de calidad, unos textos donde la sorpresa y la incertidumbre están presentes. Este libro nos arrastra a través de sus letras a un mundo circular, cargado de soledad, esperanza y relaciones humanas. Una escritura que está siempre oscilando entre el azar y la decisión.

Begoña Callejón




Título: Los lados del círculo

Autor: Almilcar Bettega

Traducción: Lola Núñez Flores

Editorial: Baile del Sol Ediciones

Págs: 131

Precio: 12 €