miércoles, 31 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 211. Aldo Alcota

Día 211. Aldo Alcota. Por donde pasa la poesía (2011)



PELUQUERA SICILIANA

Estoy incómodo en la peluquería,
pienso en algo:
una letra occipital
cavernaría
centrífuga.
Un sudor incontrolable asusta a la peluquera.

De reojo veo su boca y me desespero,
gotas, gotas se deslizan en mi cabello
sudado como una rareza de feria.

Una tijera que no corta,
un barco de cobre en la nevera,
zumbido de iguana en una caja-nada,
levantarme del asiento y correr.

Pago sin decir nada,
me hablo a mí mismo y sigo sudando
como si estuviera esperando un perro de dos cabezas,
sacralizado como fetiche.


martes, 30 de julio de 2013

Canto a la dignidad humana desgranado en aforismos


2013 de Poesía. Día 210. María Eloy García

Día 210. María Eloy García. 23 Pandoras (2009)



DEBE HABER

hoy noto cómo chocan contra sí mismos los átomos
para mostrar la maravilla de una sola cosa
hoy noto correr a los corredores seguros
y veo seguir con sus maletines
a los pérfidos burócratas
que clavan en la moneda única
los pernos de los dientes construidos
para la sonrisa en venta
venden cada día vuestros calambres del olvido
venden vuestra prisa
lo que menos vale del tiempo
venden con sus cuerpos inclinados por lo rápido
cuarenta y cinco grados de balances
grabados en los claros cráneos de los pagadores
venden también la visa o la vida
la vida
ese pequeño espacio entre el debe y el haber
y hoy he visto que sois vosotros
fieles estáticos deudores
en vuestras cuentas mes vencido
los verdaderos consumidores del tiempo
que ellos llevan en el maletín
de doble forro
por el que cae lejana y sin ruido
la última factura del ocaso


lunes, 29 de julio de 2013

YO MATÉ A RAJOY. Un libro que no te puedes perder

Desde la Biblioteca quiero recomendaros un libro de la editorial Baile del sol, " YO MATÉ A RAJOY" de Juan Carlos Pérez


En estos tiempos que corren debido a la crisis,los recortes y la panda de corruptos que nos gobiernan,la desesperanza y el desasosiego es fácil que se apoderen de nuestra mente.
Esto mismo le pasa al protagonista de esta historia,Juan Carlos, un padre de familia divorciado que se queda sin trabajo debido a la situación tan deprimente que estamos viviendo.

... Me parece increíble que sigamos tragando con todo esto y seamos incapaces de salir en masa a la calle y devorar hasta los tobillos a toda esta calaña. ¿Qué hipnótico brebaje nos están suministrando que nos paraliza?

... <<Como nos sigan apretando tanto, la desesperación va a hacer que alguien se cargue a ese cabrón, no sé como todavía nadie lo ha hecho>>

Decidido a hacer justicia, Juan Carlos elabora un plan, Matar a Rajoy.

A Juan Carlos no le tiembla el pulso, su rabia y dolor aumenta con todos los desahucios y suicidios de una sociedad al límite.

... Se le va a terminar la impunidad a él, y al resto de la comparsa, le van a entrar unos repentinos ardores de estómago ante la posibilidad de que una bala les destroce la careta...

... He pensado mucho en la putada que les voy a hacer si esto sale mal. Pienso también en Delia, en mis padres, en mí, en la vida y sus infecciones, en la sencillez, pero,sobre todo, en por qué no nos dejan vivir en paz en vez de estar todo el día haciéndonos la puñeta...

YO MATÉ A RAJOY, es un libro cercano, fácil de leer y que desgraciadamente, por unas cosas u otras, no tardarás mucho en sentirte identificado con él.

La historia de Juan Carlos podría ser la historia de algún familiar, algún amigo, un vecino.
La historia de Juan Carlos podría ser tu propia historia.

Altamente recomendable.

¿Dónde comprarlo?




http://culturalblogonline.blogspot.com.es/2013/07/yo-mate-rajoyun-libro-que-no-te-puedes.html?spref=tw

2013 de Poesía. Día 209. Rachael Lindsay

Día 209. Rachael Lindsay. Amor y volcanes (2010)



Lágrimas de cristal

Los cielos están grises
y me pierdo entre tus estados oscuros

Mi mente se desdibuja
como el aire y el mar
cuando se intentan juntar

Tantas gaviotas
revoloteando entre dudas
van rebotando incertidumbre en el frío de la mañana

Y perdido en agua
con la ventana abierta de par en par
agarras tu lágrima de cristal
girándola suavemente en la mano


domingo, 28 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 208. Alfredo Espinosa Aguirre

Día 208. Alfredo Espinosa Aguirre.  Tan lejos de Dios (2010)



Música letal

El traqueteo de una AK - 47, su música letal, 
rafaguea la flor del árbol seco. Nadie
sabe cómo se llamaba esa muerta
Las ambulancias aúllan por las calles, la policía 

acordona la zona: un bebé acribillado,
y con el tiro de gracia
Los gladiolos se abren como siempre
Aparecen cadáveres en las cajuelas de los autos
en los tambos de basura, en lotes baldíos,
en sacos, descabezados, torturados, descoyuntados,
un cementerio de gemidos, canciones
arrancadas al corazón. El país es un mapa agujerado, 

una cruz de ceniza. Sólo la mariposa traspasa
la escena del crimen. El sicario desayuna tarde,
agita el café con el movimiento de esas caderas,
el periódico chorrea y se estremece. La silla del político 

se apoya en el fango, el desfile fúnebre pasa
silencioso, van juntos, rotos, los corderos y los machos 

cabríos, y la sangre en el hocico de los lobos
¿Debo añadir que las encuestas favorecen al príncipe, 

la bolsa está a la alza y los pájaros aún gorjean? 




sábado, 27 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 207. Enrique Falcón

Día 207. Enrique Falcón. Once poetas críticos en la poesía española reciente (2007)



ESPAÑA Y POESÍA, VIEJITA Y REGAÑADA

con la complicidad de Eladio Orta

En mi país cocido de lejos buenamente con las tripas afuera 
los poetas comen jeringuillas con leche
carne de avestruz
brotan de las cuevas con un poco de saliva

se derraman por el campo como niños sin dientes.

En mi país cuchillo en las trenzas de los buenos empresarios 
no hay huelgas generales:
los poetas las evitan con un trapo en la boca
brotan de las cuevas con temblores de piel

y lamen los cercados de los hombres ricos.

En mi país castigo en periferia de los barrios más bellos 
se prohíben cosas que no sean de madera:
con blancos mondadientes se arrancan los colmillos
los poetas honestos de todo el país

brotan de las cuevas con los párpados mudos 
para luego calmarse con trescientos espejos 
los poetas honestos de todo el país.


Mi?
verdadero conflicto:
que me muerden mis versos, 

que no tengo país. 


viernes, 26 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 207. Miriam Reyes

Día 207. Miriam Reyes. 23 Pandoras (2009)



DEJAMOS UN RASTRO DE HUMEDAD EN LAS PAREDES
en los marcos de las ventanas
dejamos los fregaderos atascados
papeles tapando los cristales
ratones muertos en el horno
dejamos cal en los espejos del baño
zanahorias podridas en la cocina
un sudor enfermo en los cerrojos de las puertas
ecos de horror rebotando en los techos
un olor a pesadilla por todas partes
un olor a gritos y a lágrimas derramados
sobre las quemaduras de la alfombra
sobre la grasa de los hornillos, la funda del colchón y
los marcos astillados de las puertas.

Dejamos nuestro amor aspirado vuelto pellejos
—nuestro amor de un mes de vida
con toda su muerte por delante—
flotando en una palangana blanca
en el lugar donde perdí el sentido.


jueves, 25 de julio de 2013

Jorge Majfud: “Crisis”

Baile del Sol, Tenerife, 2012 146 páginas. 14 euros

24 julio, 2013 por 
Sólo despegándonos de lo concreto, pero atendiéndolo, podremos aspirar a comprender la complejidad de la globalidad de nuestro mundo. El narrador uruguayo Jorge Majfud articula ambas escalas en esta excepcional novela, que nos plasma un excelente retrato sociológico y cultural de las personas inmigrantes en EEUU, y de la propia sociedad de este país.
La obra está formada por la yuxtaposición de fragmentos de historias, encabezadas por la fecha, el lugar (diferentes localidades de EEUU cercanas a su frontera sur) y el valor del índice Dow Jones. Así, se hace explícita la relevancia del capitalismo a la hora de condicionar la vida (y comprender su situación) de estos inmigrantes. A su vez, la multiplicidad de ciudades en la que figuran unos (aparentemente) mismos personajes da pie a entender la vida errante de los sin papeles; en constante huida y en interminable búsqueda. De esta forma, se obtiene una novela con un protagonista colectivo en la que no se pierde la individualidad. Además, muchas de esas piezas constituyen verdaderos microrrelatos, y funcionan de manera autónoma. A pesar de ello, el conjunto se potencia entre sí, por acumulación.
Crisis resulta un libro estremecedor, que presenta un relato duro, lleno de injusticias, de dolor, de abusos de poder. Aborda el racismo, la explotación laboral, los traumas y las dificultades psicológicas y sociales de los inmigrantes, o la conveniencia para el capitalismo de contar con la mano de obra barata y sumisa que encarnan los sin papeles. De esta forma, el autor explora sus miedos, sus sueños, sus esperanzas, a través de escenas representativas, de marcado valor simbólico y metonímico, que le ocurren a un personaje concreto, aunque le podrían suceder a cualquier otro. De hecho, la desubicación sirve para globalizar los acontecimientos, pues puede que sucedan en un mismo lugar o en cualquier otro espacio.
Por otro lado, Majfud juega con diversos tipos de narrador. En concreto, el que se enuncia en segunda persona es el más duro, pues desnuda el interior de la persona migrante al dirigirse a ella. Igualmente, el escritor pone el foco en las diferentes esferas implicadas: migrantes, familiares, mafias, empleadores, trabajadores locales… Además, de una manera muy hábil e inteligente, también construye un retrato de la sociedad estadounidense: su represión afectivo-sexual, el culto y la normalización de la violencia, el control de pensamiento…  De esta manera, además, Crisis constituye una denuncia de un estilo de vida deshumanizado, hipócrita y personalmente empobrecedor. Así, Majfud abre numerosas puertas a las que asomarse, lo que permite vislumbrar distintos ámbitos de la realidad. Por tanto, como confluencia de voces narrativas también resulta muy interesante el libro.
A su vez, Crisis alterna ficción con hechos reales o reproducción de noticias. Igualmente, se incorporan fragmentos ensayísticos, a modo de disertaciones de los personajes. En ese sentido, a través de uno de ellos, Majfud plantea una sugerente teoría sobre la ficción y lo real en la narrativa: el «desdoblamiento-transferencia». En ella, se aplican nociones de proyección, identificación y ficción compensatoria, y busca, así mismo, ofrecer una nueva lectura de esta obra.
Con todo esto, el autor consigue dotar de fluidez y dinamismo al volumen, que no posee una trama sino que, de manera fragmentaria, levanta una visión panorámica del presente.
En ese sentido, Jorge Majfud demuestra un gran acierto al emplear esta construcción en la novela, pues potencia sus objetivos de discurso y, en sí misma, la estructura aporta contenido en esa misma dirección.
Por todo ello, se trata de una obra muy rica, por la que pululan decenas de personajes que, en definitiva, tratan de sobrevivir en y a un mundo gobernado por un sistema económico despiadado. Así, la brillante denuncia de Majfud apela a la dignidad, al humanismo, en un relato amargo y desalentador. Crisis resulta una novela espléndida, hábilmente construida, que nos presenta numerosas vías para observar nuestro tiempo.

2013 de Poesía. Día 206. Anotonio Méndez Rubio

Día 206. Anotonio Méndez Rubio. Once poetas críticos (2007)



DE DONDE VIENES TÚ NO HAY ESPERANZA
apenas sino sombra
temblando entre las hojas
noche nueva en el agua

de cuando vienes tú no hay ya futuro
y sin embargo nada
en tus manos significa renuncia
nada derrota nada arena oscura
ni nada desencuentro
nada
sabes del frío con que mi voz te espera



miércoles, 24 de julio de 2013

optimístico: entre casas y caminos/ optimístico: seeking for love and self.

( publicado en Tiempo de Curar / Healing Time)
__Escrito por Juan Ramón Fdez. Villanueva__ 

images-1      

Si toda obra creativa lleva en sí misma la capacidad de ser interpretada de forma múltiple, un poemario lo es mucho más.
   Optimístico, de Iñaki Echarte Vidarte, es un poemario breve e intenso, oscuro y lleno de claridad, de verso rápido, a veces monosilábico, y lleno de música interior, calllada, en susurros, pero siempre presente, única.
   La búsqueda en Iñaki Echarte Vidarte es una constante (Blues y otros cuentos es un ejemplo de ello). El ansia de contacto, de olor, de posesión también, y la necesidad desnuda de amor, de compañía, de deseo y, ciertamente, de soledad lo definen y usa esa lujuria de sentidos para traernos, en poemas cortos y directos, todo lo que le consume y lo que sueña en conquistar.
   Algunos de estos pequeños poemas son como bombas que, estallando, todo lo fragmentan. Otros son cantos al miedo que nos causa el abandono del amado; la necesidad de ser querido, de ser deseado y agotado y, también, el espacio hueco de la soledad y la sonoridad del vacío, que se oye a cristal roto, a sueños quebrados.
   Entre casas y caminos (juega magníficamente bien con el significado de sus apellidos vascos), Iñaki Echarte Vidarte nos habla de ojos de hierba en verano que brillan con ansia y buscan sin fin, como sus propios ojos y la voz que, profunda, emerge de una garganta que decanta sensualidad  y una cierta serenidad que sus poemas desenmascaran.
   Optimístico habla de amor, aunque nunca aparece escrita tal palabra, y de la fragilidad que ese sentimiento nos demuestra en todos, los miedos que alberga, las pasiones que desata, las necesidades que crea y la fugaz felicidad que nos regala una vez alcanzado el apetito y colmado y descansado, piel contra piel, piel contra vacío, aire y espacio lleno de música, cotidianidad y latidos del corazón.

2013 de Poesía. Día 205. Roxana Popelka

Día 205. Roxana Popelka. Cumple años feliz (2010)



una frase de copérnico
La misma fuerza que conserva
un proyectil disparado
cuando se aleja de la mano del
lanzador.
Y creo que esa misma
fuerza la utilizo
para levantarme cada día,
para volver cada noche
al mismo punto de encuentro, porque
no hice caso de la última frase que
me dijiste cuando te ibas:

“No merece la pena
los planetas seguirán girando
alrededor del sol”.


martes, 23 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 204. Moisés Pascual

Día 204. Moisés Pascual. Monólogo del náufrago (2002)



CUERPOS DESNUDOS

Fugaz y endemoniado
el amor es una blasfemia,
una candela que destila
desvelos como eclipses y escándalos.

Minutos descarrilados en la piel
como huracanes que nieblan
limpias proximidades remotas.

Fugaz y endemoniado
el humo del tiempo cubre
esos cuerpos desnudos que fuimos luz.



lunes, 22 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 203. Luis Vásquez Coronel

Día 203. Luis Vásquez Coronel. Orgasmina (2005)


EL EDÉN

La garza mínima
alienta sus alas,
otra garza
huye inclinada.
Reptil celestial
las electriza de miedo.

Radiante trébol,
se erizan tus hojas y
mil líneas de electricidad
se rizan contra este cielo.

Cerca, me inclino
a tu pecho;
el columpio nos conmociona
en este destierro.


domingo, 21 de julio de 2013

Qué bien, qué bonito.



De vez en cuando aparecen libros en el camino que nos atraen sin saber muy bien por qué: desconocemos al autor, la sinopsis no cuenta demasiado, el título no es para tirar cohetes y la portada no puede ser más minimalista. Y, sin embargo, algo tienen que despiertan la curiosidad del lector, deseoso de conocer qué es lo que lo hace tan llamativo a sus ojos. Esto mismo me pasó hace poco con el libro que les traigo hoy, titulado Qué bien, qué bonito y escrito por el croata Ivica Prtenjača: cuando lo vi en  el boletín de novedades de Baile del Sol no sé qué clase de hechizo hizo que me fijara en él que no pude reprimir el deseo de leerlo de inmediato. Gracias a la generosidad de la editorial pude adentrarme en esta magnética novela esperando descubrir una historia diferente.


Qué bien, qué bonito narra el día a día de Ivica, un joven croata de provincias que decide cambiar su vida mudándose a Zagreb, la capital de su país. Sin dinero ni demasiadas esperanzas, logra alojamiento en un cochambroso piso en el que espera dar un vuelco radical a su anodina existencia. Cuando consigue trabajo en una pequeña librería parece que empieza a salir del pozo de indiferencia en el que ha estado sumido en los últimos tiempos, aprovechando dicha coyuntura para rememorar un pasado que pocas veces fue mejor y  forjar relaciones duraderas con nuevas personas que le ayuden a encontrar su lugar en el mundo.


Ivica (trasunto del propio autor), es el protagonista central de esta historia, que será contada por él mismo: conoceremos de primera mano su carácter un tanto arisco y socarrón, su adaptación a la gran ciudad, sus recuerdos más y menos dolorosos y, en general, los pensamientos que mueven sus instintos. No se puede decir que sea un personaje excesivamente carismático: se trata de un chico normal con las ilusiones de cualquiera a su edad y con un pasado marcado por la guerra que atisbamos ligeramente, pero que en ningún momento toma las riendas de la historia. De sus amigos sabemos poco más de lo que Ivica nos cuenta, aunque podemos adivinar a medida que avanza la historia cómo se estrechan sus incipientes lazos y la importancia que empiezan a cobrar en la vida del protagonista.


El estilo del autor es sencillo pero hermoso; cuenta el devenir de Ivica de una manera accesible, incluyendo tanto expresiones muy actuales como evocadoras metáforas para explicar determinados acontecimientos, conectándolos incluso con la mitología propia de su país. Hace uso, en general, de una prosa cuidada y bella que influye positivamente en la lectura de la novela. Asimismo, he de decir que el libro presume en su sinopsis de destilar ciertas dosis de humor con las que yo no me he topado o bien no he comprendido. La historia se conforma a lo largo de 21 capítulos cortos que, aunque mantienen al mismo actor principal como hilo conector no están directamente relacionados entre sí, actuando casi a modo de colección de relatos independientes con un personaje en común. En una nota previa, el autor aclara que su intención era conformar una trama introspectiva, sin grandes acontecimientos que la marquen, queriendo plasmar las vivencias cotidianas de Ivica a modo de fotografías aisladas, sin una continuidad argumental y ni siquiera temporal: Prtenjača crea una estructura con saltos hacia delante y hacia atrás en el tiempo, con nuestro "héroe" como nexo en común pero sin intención de someterlo a un suceso decisivo que marque sus acciones.


Creo que hay momentos en la vida de todo lector en los que otras lecturas previas condicionan la apreciación que se tiene de una nueva historia que cae en sus manos, y puede que ésto es lo que me haya sucedido a mí con Qué bien, qué bonito: al haber leído en los últimos meses varias novelas con una premisa similar (joven con pasado más o menos tortuoso que comienza una nueva vida con esperanzas e ilusiones pero con el lastre de los fantasmas interiores llenando el equipaje), ésta no me ha aportado nada nuevo, pareciéndome otra ración de más de lo mismo. Me da la sensación de que hay toda una generación de escritores treintañeros traumatizados por una infancia - adolescencia de esas que no se ven en las series de Disney Channelque se han puesto de acuerdo para recordar ese pasado y escribir cómo un cambio de aires y un  futuro prometedor puede remediar todos estos males. En el caso de este libro, lo notable de la prosa del autor, lo "exótico" del escenario (nunca hasta ahora había leído una obra de ficción situada en Croacia) y la perfecta edición de Baile del Sol, que ha optado por un diseño sencillo pero eficaz a la par que agradable, salvan a una historia que, por lo demás, es tan discreta como aparentaba a primera vista. En conclusión, sólo puedo recomendar esta novela a aquellos lectores que se identifiquen especialmente con estos relatos intimistas de muchachos taciturnos que psicoanalizan su pasado y ponen sus esperanzas de superación en un no muy lejano porvenir; yo, de momento, me abstendré de volver pasear entre estas narraciones que campan a sus anchas por el bulevar de los sueños rotos. Nota:  5´5/ 10.

"Tenía una cama estrecha de la que pronto nos resbalamos a una alfombra suave y limpia. Tenía dos sillones que viajaban por el parqué brillante y lustroso. Tenía una mesa de trabajo de la que se cayó la lámpara halógena. Tenía un espejo grande en la puerta del armario que se empañó con el vapor de nuestros cuerpos. Y tenía una ventana grande, con un banquito ancho delante, que daba a la calle de la tarde, a Tuga y Buga, al océano, a los colmillos del jaguar en la selva virgen, a la tribu desdichada y a los ángeles negros guitarristas que viajan en el tranvía por Lisboa y cantan: 
I´d rather be a devil, than that woman´s man..."
http://eladofriodemialmohada.blogspot.com.es/2013/07/que-bien-que-bonito.html 

2013 de Poesía. Día 202. Eva Vaz

Día 202. Eva Vaz. 23 pandoras (2009)


FRÁGIL

Nunca te oculté la verdad,
como una tachadura,
un soplo en el corazón,
una pierna más corta,
como una epidermis transparente
que deja ver un mapa de neurotransmisores ebrios 

girando sobre sí mismos.

Pero tú sólo veías un mapa 
de juguete. En tres tomas. 
Veneno de colores.
Y nunca sentiste miedo 

hasta el día en el que sentiste 
miedo.

Sé que te sentiste frágil.
Sé de tu invalidez,
del auxilio que rogabas como 

un hombre perdido
con una responsabilidad inédita: 

mi vida.

Sé que te queda grande
esta forma mía de codearme con 

la muerte.


Sé que te sientes pequeño y nada
cuando ves esta forma perdida e iracunda 

de mirar, ante preguntas que no formulaste.

Y cómo te daño a través de mi daño 
para matarnos violentamente.
Y luego me derrumbo
y ya comienza el terror

y mi historia se convierte
en una curiosidad para paseantes 

solidarios
que me salvan la vida.


Y ya todo se termina.

Mirando al suelo te abrazo y te digo: 
—Otro día, mi vida,
hoy estamos muy cansados
para morir. 



sábado, 20 de julio de 2013

El zahorí del Valbanera

Juan-Manuel García Ramos
Baile del Sol, Tenerife, 2013
107 páginas. 10,40 euros

NARRATIVA. EN LAS PRIMERAS DÉCADAS del siglo XX los jóvenes canarios soñaban que en Cuba había tesoros que podían aliviarlos, a ellos y a sus familias, de la miseria que se vivía en el archipiélago. Entre esos emigrantes estuvo el zahorí del Valbanera, José Aquilino Ramos, que en un tramo de la travesía se fio de su instinto de adivino y convenció a otros compañeros de viaje en ese barco que no siguieran el trayecto. Acertó.
El naufragio del barco Valbanera fue uno de los percances más graves de la historia de la navegación mercantil española. La narración que ha escrito ahora el nieto de José Aquilino, el novelista y profesor Juan-Manuel García Ramos, es a la vez recuento y una ficción, o al menos así lo presenta él, pero puede leerse enteramente como una cosa y como la otra. La base esencial del relato, desde que comienza la aventura del zahorí tinerfeño hasta que se historia culmina con la muerte, sucedió o pudo suceder, está en la memoria, puede estar en la leyenda, y aquí se convierte en literatura. Es más, sigue sucediendo, pues los antecedentes sociológicos, económicos y políticos que describe el nieto se corresponden con lo que pasaba en las islas cuando se producían aquellas emigraciones americanas y también con lo que pasa ahora mismo en Tenerife y en todo el archipiélago.
En algún momento del libro, el nieto explica, nombrándose siempre en tercera persona: "Es mejor no visitar los lugares del ayer y salir de ellos añorando lo que se fue para siempre, leería el nieto muchos años más tarde, y tenía que concederle la razón a ese otro escritor que también rememoraba otra infancia en Sudáfrica". Pues en ese caso, Juan-Manuel García Ramos halla una vía literaria para evitar esa visita a "los lugares del ayer" y presenta su indagación como un diálogo, en tiempo presente, con el abuelo José Aquilino. Esa reelaboración de una conversación seguramente inventada por el nieto a partir de otras que tendría en vida del abuelo, le dan al libro la categoría de una confesión que incluye referencias muy sugerentes, y muy dramáticas, a la historia de las islas, incluyendo las dificultades económicas y las desgracias políticas que han sufrido, y a la propia historia de Cuba, cuya decadencia revolucionaria él mismo vislumbró mientras estuvo allí de emigrante.
El zahorí del Valbanera, además, ofrece un recorrido por los sentimientos más complejos de la vida de los hombres: la evidencia de la traición, el descubrimiento del amor (que el nieto relata paralelo a los descubrimientos pudorosos que le revela el abuelo) y la reflexión política. El breve pero intenso relato de lo que ocurrió en la Guerra Civiel (en las islas y en la Península) completa un esquema de asuntos que hace de este libro una lectura imprescindible para entender qué pasó con los sueños (y las pesadillas) con que se despertó el archipiélago en el siglo XX. Son sueños (y pesadillas) con los que seguimos viviendo. Juan Cruz

Babelia/El País 20.07.2013

2013 de Poesía. Día 201. Antonio Orihuela

Día 201. Antonio Orihuela. Once poetas críticos en la poesía española reciente (2007)


AL FINAL DE LA COMIDA 
le he enseñado a mi madre
el libro de poemas
que acaban de publicarme.


La artritis de sus manos
apenas le deja mantenerlo abierto
y sus escasos años de escuela
recorren las palabras
como un niño que gatea
hasta hacer incomprensibles mis versos.


Loca de contenta, 
orgullosa de su hijo,
le lee un poema a mi padre 

que la mira desde el sofá.

Cuando termina,
levanta la cabeza
y ve a mi padre dormido.


Lo despierta
y vuelve a comenzar 

hasta tres veces
la lectura...



Yo no digo palabras,
pienso en los amos de la fuerza de los humildes, 

en el tiempo delicioso que les robaron,
en la lengua que apenas les dejaron para comer 

y reproducirse,

en los profesionales del estilo, 
en los críticos de las letras,

y en lo lejos que estará siempre 
el pueblo sencillo y trabajador 
de eso que llaman literatura. 


viernes, 19 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 200. Armando Rivero

Día 200. Armando Rivero. En la jaula del vino (2004)



Hay una tristeza circense
en estos movimientos
tus manos aliadas de mi espalda
son vagas y son párpados
y aún pertenece una de mis alas
a las paredes de ésta habitación.
Quiero probar la carne de las nubes
y de las estrellas,
la boda de mi madre está en el suelo
dónde la arena, la malva, lo que no sirve,
lo que no es lluvia,
y el vino que tropieza mi mano cada noche
en la repetida fiesta de ayer.
Apaga la voz del espejo
porque quiero bajar a través de ti,
ya que nosotros estamos tan cerca
que casi, somos algo.


jueves, 18 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 199. Rubén Pla

Día 199. Rubén Pla. Las formas de la bestia (2005)


Para poder huir
de lobos hambrientos
y otros inmobrables asediadores,
el estúpido rebaño
se puso bajo
la protección
del pastor
y el matarife.


miércoles, 17 de julio de 2013

UN VERANO DE POESÍA

so155ABRAZANDO VÉRTEBRAS
Alberto García-Teresa
978-84-15700-78-4
so153CIRUGÍA PARA QUISTE DEL EPIDÍDIMO
Manuel del Barrio Donaire
978-84-15700-75-3

so154SANTA CLAUS VA A REHAB
David Benedicte
978-84-15700-77-7
so166EL BAR DE LEE
David Pérez Vega
978-84-15700-96-8

so156PALABRAS DE AMOR PARA
ESTA GUERRA
Begoña Abad de la Parte
978-84-15700-81-4

so157ENTRE EL RUIDO Y LA VIDA
Alejandro Palomas
978-84-15700-82-1

2013 de Poesía. Día 198. Miguel Ángel Martínez

Día 198. Miguel Ángel Martínez. Las llaves de Épsilon (2007)


Llevo aquí
y todos los que me miráis
lo sabéis
Desde el principio del mundo y en el final estaré

Los señores
los buenos y malos actores
La serpiente
morderán sin darse cuenta otro periodo extraño: Siglo

Había luces
Todo estaba y todo será conocido
¿Habéis visto?
El desierto de lo paranormal volverá cada verano


martes, 16 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 197. Brenda Ascoz

Día 197. Brenda Ascoz. 23 Pandoras (2009)


¿No lo veis?
Soy eterna.
Tengo en los ojos
todo el presente del mundo.


lunes, 15 de julio de 2013

2013 de Poesía. Día 196. Carlos Pinto Grote

Día 196. Carlos Pinto Grote. Cantos para una desolación (1998)


Te digo que crear un mundo de pecado y culpa
ha sido el gran error del hombre.
Al final, la Ley ha secuestrado a la Justicia.

Ya no se intenta la salomónica decisión, falsa también,
de dividir en dos al inocente.

Serás culpable,
aunque no hayas estado en el lugar del crimen.

Ellos, en sus altos tronos,
dirán las palabras de la condena,
porque el culpable es necesario
para ejercer su oficio de iniquidad
y de nada ha de servirte el alegato
con el que intentas justificar la felonía
de estar entre los vivos.
Los Jueces, ¿alguien puede juzgar?
no precisan más prueba que su odio
a quien un tilde de la Ley transgrede.

Y esconden, entre palabras engañosas,
el signo de la degradación, Y te acusan
y duermen esa noche,
—comienza aquí el verdugo
a nutrir tu desesperación—,
sin remordimiento.

Dante no habló del décimo círculo del Infierno
donde los Jueces,
vistiendo las negras togas de la muerte,
se culpan entre ellos y cumplen sus condenas
toda la eternidad.

Digamos que ante un juez, no hay diálogo posible.
Entre él y nosotros, sólo el miedo.