Día 105. Armando Rivero. Las viejas traiciones (2009)
cuando no hubo más sol
entrando por la ventana de mi compartimiento,
oscureció, y me baje en la siguiente ciudad,
me hice a la nueva tierra que pisaba
como el primer hombre en la luna
con el único idioma que me enseñaste
y algunos billetes cambiados.
Allí sólo habían llaves
intentando abrir puertas que cerradas estaban mejor,
individuos con demasiado pasado
gritándole al peligro en otro idioma,
bicicletas enganchadas con fuerza,
como algunas amantes a sus amantes,
y niños preguntándole a sus mamás por sus papás.
Bonito panorama hasta el próximo tren,
todo un circo que vino conmigo
y se fue sin mí.
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