Amílcar Bettega: Los lados del círculo
Idioma original:
portugués
Título original: Os lados do círculoAño de
publicación: 2004
Valoración: Muy
recomendable
Reconozco que no habría leído este libro si no hubiera
conocido personalmente a Amílcar Bettega, a través de mi amigo Everton Machado,
en Lisboa. Pero también digo que este libro merece ser leído, independientemente
de que se conozca personalmente a su autor. Porque es un gran libro, que
demuestra una maestría y una audacia técnica muy poco usual hoy en
día.
Los lados del círculo ha sido clasificado como libro de
relatos, aunque está, de hecho, en la barrera entre el libro de relatos con
marco, y la novela episódica. El primer texto, titulado "El puzzle (fragmento)"
-que enlaza obviamente con el último, titulado "El puzzle (suite e fin)"- nos
presenta a un grupo de personajes, incluido el propio narrador, que se reúnen en
la playas de Porto Alegre para hacer esculturas circulares formadas por objetos
varios. El resto de los relatos nos muestran los destinos (algunos de ellos
trágicos) de estos personajes, lo que da unidad a un conjunto por lo demás muy
variado, en cuanto a tramas y técnicas.
Respecto a las tramas, hay
cierta tendencia a reflejar seres solitarios o desquiciados (como en "Teatro de
muñecos" o "La aventura práctico-intelectual del señor Alexandre Costa"), e
historias amorosas más o menos convencionales (en "La próxima línea" o "The
end"); la violencia social o sobrenatural se hace presente en relatos como
"Círculo vicioso" o "Verano". La propia escritura también se convierte en tema
en relatos como "A/A Editor cultura sigue resp. Cf. Solic. Fax" o "Coartada", o
a través de la pregunta, repetida como un estribillo a través de todo el libro:
"¿Estás escribiendo?". De hecho, la última frase del libro es "Voy a
escribir".
Pero como decía, lo que destaca sobre todo en este libro es la
maestría técnica del autor, que hace casi un muestrario de maneras de narrar: el
monólogo interior, la narración en primera persona, la autoficción, el
seudo-informe, permitiéndose también algunas experimentaciones formales (textos
a doble columna, representaciones tipográficas del espacio, textos
fragmentarios...) a las que la mayoría de los escritores parecen haber
renunciado, aunque no hayan dejado de ser efectivas.
Creo que es
imposible hablar de Los lados del círculo sin mencionar a Julio Cortázar,
y no solo porque aparezca como personaje en uno de los relatos. El mundo de
Amílcar Bettega es muy cortazariano, aunque con menos elemento fantástico.
Incluso el estilo de algunos relatos recuerda un tanto al de Cortázar, así como
el viaje final a París (no se puede leer la expresión el "lado de acá" sin
pensar en Rayuela). Pero esto no quiere decir que Bettega sea un simple
imitador de Cortázar, sino que comparte con él inquietudes que van del contenido
a la estructura al estilo, o del estilo a la estructura al contenido; que
traspasan toda la obra, vamos.
Los lados del círculo es, en todo
caso, la obra de un escritor que ya ha sido reconocido en su país, y que merece
ser más conocido "en el lado de allá", o sea, en el nuestro. Os recomiendo
buscarlo, comprarlo y leerlo; ya no se escriben muchos libros como este, por lo
menos en España.
Doy fe de ello. un saludo amigos de Baile.
ResponderEliminarEsta reseña me ha abierto el apetito. Muchas gracias por el desvelamiento.
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