Yolanda Delgado Batista - Cuestionario básico - ¿Por qué escribes?
Cuando nací, la matrona encargada de darme las dos nalgadas para que rompiese a respirar, olvidó advertirle a mis padres que tuvieran cuidado conmigo, que en vez de un pan bajo el brazo, lo que traía su hija era un libro. A los tres años aprendí a leer y a escribir. Aquello a mis padres se les fue totalmente de las manos…
Escribo para detener el olvido en el tiempo, para aventar preguntas que surgen en este hábitat esquizofrénico que hemos creado los humanos. Es una necesidad casi biológica para sobrevivir en esta odisea apasionante, única y que sin remedio terminará en las profundidades de la nada. Se escribe casi siempre desde el desasosiego, cuando uno confiesa a los otros que "ya no se puede más"; una frase escrita desde el dolor con la que el escritor Cabrera Infante puso punto y final a esa maravillosa novela que es Tres Tristes Tigres.
Escribo para decir en voz alta que no estoy de acuerdo. Esa libertad que otorga la escritura es un talento valioso aunque el peaje de la solitud y la autoexigencia salga caro. Los escritores somos como Don Quijote, ese entreverado loco, lleno de lúcidos intervalos.
2.- ¿Cuáles son tus costumbres, preferencias, supersticiones o manías a la hora de escribir?
Lo único que necesito en mi mesa de trabajo es el diccionario al que dedicó su vida María Moliner. Una mujer excepcional, filóloga y bibliotecaria. Perteneció a la generación de las primeras universitarias que dio la República. Después de la guerra incivilizada sufrió represalias políticas. Hacia el final de su vida, padeció una arteriosclerosis que la mató. Muchas veces, cuando consulto este diccionario, pienso en la generosidad y el esfuerzo de muchas personas que como María Moliner, han allanado la vida de los que hemos llegado después.
3.- ¿Cuáles dirías que son tus preocupaciones temáticas?
Mujer soy; apenas de la humanidad algo comprendo. Prefiero la realidad cotidiana a la ciencia ficción; los héroes de la paz, a los héroes de guerra. Esa marcha que organizaron el pasado mes de octubre mujeres palestinas y judías para exigir la paz en su tierra, para mí tiene más valor que un encuentro diplomático.
Como escribió Hannah Arendt: lo que quiero es comprender un mundo en el que una se siente apátrida.
4.- ¿Algún principio o consejo que tengas muy presente a la hora de escribir?
Sigo el método del ruso Isaak Bábel: le doy vueltas a cada frase una y otra vez. Comienzo eliminando todas las palabras de las que puedo prescindir. Las palabras son muy astutas; la suciedad se esconde dentro de ellas. El relato lo dejo reposar dos o tres días. Luego vuelvo a examinarlo frase por frase… Recorto las frases y divido los párrafos. Como ve, mi método es muy rápido…
Componer, tachar, componer, tachar, tachar, hasta que la frase contenga la pura esencia. Aún así, siempre hay palabras semiescondidas que te hacen la puñeta. Casi nunca estoy satisfecha, pero es un aliciente imprescindible para continuar trabajando la materia del lenguaje.
5.- ¿Eres de las que se deja llevar por la historia o de las que lo tienen todo planificado desde el principio?
El desorden fue el principio o el principio fue el desorden, pero poco a poco la historia se va recomponiendo sola. Los personajes me llevan de la mano adónde quieren y luego se despiden: "¡Gracias por el trayecto! Adiós y buena suerte". Es divertido y desesperante a la vez. Prefiero la técnica abierta que siguen los directores de documentales, por ejemplo. Tienen ante sí una historia que quieren contar, pero los protagonistas y las situaciones son reales, por tanto impredecibles. Las estructuras cerradas no encajan con mi carácter. Cada uno tiene su método; por fortuna no hay reglas fijas.
6.- ¿Cuáles son tus autores o libros de cabecera?
Siempre regreso a Joyce. Fue el primer escritor occidental que dirigió la corriente de la literatura a la vida corriente. Autores que quiero, admiro y releo hay muchísimos, y no solo novelistas: Tólstoy, Gógol, Bulgakov, Chéjov; Rulfo, Cabrera Infante, García Márquez, Juan José Arreola, Josefina Vicens; Kjell Askildsen, Knut Hamsun, Günter Grass, Hannah Arendt, Ingeborg Bachman, Ivo Andríc; Amoz Oz; Faulkner, Grace Paley, Shirley Jackson; Machado de Assis, Virgilio Ferreira, Miguel Torga, Clarice Lispector; George Orwell; Natsume Soseki; Flaubert, Romain Gary; Pérez Galdós; Ortega y Gasset, Juan Marsé, Muñoz Molina, Juan Cruz, Julio Llazamares… Me interesa mucho la literatura de Patricio Pron, Alejandro Madrigal, Rafael Gumucio o los canarios Santiago Gil y Carlos Cruz. Creo que más o menos se hace una idea.
Leo también mucha poesía, un buen antioxidante para el corazón: Marina Tsvetáieva, Ana Ajmátova, Edmond Jabés, Octavio Paz, José Régio, Mamud Darwish, Ángel González, Antonio Colinas, Joan Margarit, José Luis Morante o Inma Luna.
7.- ¿Podrías hablarnos de tu último proyecto? Bien lo último que hayas publicado o lo último que hayas escrito o estés escribiendo.
Puro cuento salió a la venta el pasado 18 de noviembre y está editado por Baile del Sol. Editorial canaria con distribución internacional, dirigida por Tito Expósito. Este mes de enero cumple 25 años de vida, nada menos.Esta obra supone mi segundo libro publicado, y en esta ocasión, he tenido la inmensa suerte de contar con la generosidad del escritor Julio Llamares, autor del prólogo. Puro cuento reúne 32 relatos cortos que indagan en el amor y el desamor, en los conflictos de la infancia y la adolescencia, en la esperanza, en el egoísmo humano y a veces, en la crueldad. Historias heterogéneas que hablan de Joyce, Dos Passos, Hemingway, Stalin o Tarzán, pero también de personas corrientes. He tratado de jugar con el lenguaje intentando que el lector acabe el cuento con una sonrisa, pese al drama narrado. Una mezcla de humor canario, británico, italiano, americano, argentino y ruso. Eso hay que leerlo para creerlo, ¡amigo!
Yolanda Delgado Batista (Las Palmas de Gran Canaria, 1967). Escritora, periodista, guionista de televisión y editora literaria. Estudió Publicidad y Relaciones Públicas en la Univ. Complutense de Madrid. Ha trabajado en Canal +, Cuatro como documentalista y guionista. Coordinó los contenidos de la TV del Ayto. de Madrid. Ha colaborado para distintas editoriales: Alfaguara, Tusquets, Círculo de Tiza como lectora, traductora y editora literaria. Fue editora de un suplemento internacional, Russia Beyond The Headlines, integrado en el diario El País.
Tiene un blog: La isla de San Borondón sobre arte y literatura.
En 2011 debutó en la arena literaria con La isla de las palabras desordenadas. Una novela en la que la escritora recurría a la memoría para desentrañar una historia familiar.
Puro cuento salió a la venta el pasado 18 de noviembre y está editado por Baile del Sol, 2016. Es el segundo libro publicado por la escritora canaria.
*La foto es de Yenny Delgado Batista